Nuestra Señora de Belén

Horarios de Misa

Jueves: 19.30hs.
Sábados: 20 hs.
Domingos: 10 hs. Misa para niños, y 20 hs.

Confesiones: después de Misa.

Bautismos: segundo y cuarto domingo de cada mes.


Secretaría Parroquial


Jueves: 18.30 a 20 hs.
Sábados: 18.30a 20 hs.
Domingos: 11 a 12 hs.


CARITAS

Martes de 14 a 18 hs.



Nuestro Párroco

Pbro. Daniel Gazze



A todos los que ingresen a esta página:


*** BIENVENIDOS ***

_______________________________________________________

:: Homilías ::

(Clickear sobre la Biblia para leer las lecturas)


_____________________________________________

domingo, 13 de septiembre de 2009

Homilía Dominical

24º Domingo del Tiempo Ordinario
Lecturas
Is 50, 5-9a
St 2, 14-18
Mc 7, 27-35


El Evangelio proclamado es un ejemplo del método que utilizaba Jesús cuando tenía que explicar algún tema difícil a sus discípulos. El tema difícil es la cruz, la renuncia, la muerte. La Palabra de Dios nos invita a encontrar la grandeza del Señor en toda nuestra vida, aunque a veces resulte difícil encontrar esta grandeza en la cruz.

Cuando Jesús habla del tema, lo hace para revelar el amor de Dios hasta el extremo. Por su entrega hasta las últimas consecuencias, también el dolor y el sufrimiento son una oportunidad para amar más, a Él y a los hermanos. El mensaje de la cruz no es "sufrí" sino "amá hasta el extremo". No vivas para vos mismo, encerrado en tus propios intereses, no hagas de tu propio yo el centro del mundo, no creas que podés salvarte solo: "el que quiera salvar su vida la perderá, pero el que la entregue por mí la salvará."

Y el método de Jesús para llevar a los discípulos a esta sabiduría aparece claro en los primeros versículos. Jesús no impone una respuesta, sino que suscita una pregunta. ¿Quién dice la gente que soy yo? Interroga sobre la realidad, sobre lo que dice la gente común, sobre las opiniones y esperanzas del pueblo.

Ayuda saber que en aquel momento el pueblo de Israel -sometido al imperio romano- vivía un momento de gran inquietud religiosa, cultural y política. Todos esperaban que sucediera algo distinto a lo que vivían todos los días. Esperaban la liberación. Querían un líder que los rescatara de la opresión. Es decir, anhelaban al Mesías prometido.

Pero el mesianismo de aquel entonces era un mesianismo político, basado en estrategias de poder, en la fuerza y en el esplendor humanos. La respuesta de la gente sobre Jesús -"sos Juan el Bautista, sos Elías o un profeta"- revela que el pueblo no veía en Cristo esas actitudes. La persona y enseñanza del Señor no tenían nada que ver con esa salvación esplendorosa. El mesianismo de Jesús se realiza en la entrega de amor por nosotros. En la humildad, en la mansedumbre, en la misericordia.

Tampoco los discípulos lo entendieron tan rápido. ¡Ellos también pensaban como la gente de su época! ¡Ellos también estaban ilusionados con una salvación humana! El mismo Pedro tiene que ser corregido por Jesús cuando quiere apartarlo de la cruz. La respuesta de Jesús a Pedro es una invitación constante a que toda la Iglesia ponga su confianza en el Evangelio y no solamente en estrategias humanas, políticas o de cualquier tipo.

Y por último, participemos nosotros también de este diálogo. ¿Qué dicen de Jesús en mi ambiente, en mi lugar de trabajo, en mi familia? ¿Qué lugar ocupa Jesús en mi proyecto de vida?
Y demos un paso más: Jesús también nos dirige la pregunta en primera persona: "para vos ¿quién soy yo?" Esta pregunta de Jesús nos invita hoy a replantearnos las respuestas que le hemos dado hasta ahora: tal vez hayamos acertado pero, como Pedro, no terminemos de entender todo lo que significa el encuentro con Cristo.

P. Gerardo Galetto

No hay comentarios:

Publicar un comentario