Homilía Dominical

Domingo de Ramos
Lecturas
Is 50,4-7
Flp 2,6-11

Lc 22,14-23,56

Hoy la homilía va a ser muy breve: en realidad el mensaje está en cada uno de los gestos y símbolos que vivimos en la liturgia de este día.

El mensaje está en la procesión que hemos hecho, en el relato de la entrada humilde y mansa de Jesús en Jerusalén, en la proclamación de su Pasión, prueba de amor hasta el extremo. El mensaje está en el olivo bendecido, signo de paz, de reconciliación y del señorío sin ostentación con el que Cristo enfrentó su destino.

En estos días reviviremos su Pascua, es decir su triunfo sobre el mal y la muerte, su victoria compartida con nosotros.

Este tiempo de Semana Santa nos invita a contemplar y a celebrar la vida que se renueva, y a preguntarnos: ¿qué tenemos que renovar? ¿Qué cambios debemos hacer en nosotros, en nuestras familias, en la Iglesia, en la sociedad? Y al contemplar el olivo que nos llevaremos a casa, recordar la invitación de seguir a Jesús en todas las circunstancias de nuestra vida.

P. Gerardo Galetto